Las patologías de las encías deben tratarse con inmediatez para evitar daños mayores que puedan afectar a las piezas dentales. Los primeros síntomas, tales como inflamación, sangrado, mal aliento o sensibilidad dental, son la señal de alerta para acudir a la clínica de periodoncia lo antes posible.
El especialista, tras un análisis y diagnóstico, determinará cuál es el tratamiento más adecuado para recuperar la salud bucodental. La periodoncia abarca diferentes técnicas, que a veces suscitan dudas entre los pacientes. Hoy hablamos de ellas.
¿QUÉ ES LA PIORREA DENTAL?
La piorrea dental es una enfermedad de las encías que provoca que los tejidos que sujetan el diente se debiliten. Esta dolencia, también conocida como periodontitis o enfermedad de las encías, tiene consecuencia la pérdida de piezas dentales. Por este motivo, vital tratarla ante los primeros síntomas.
El origen de la piorrea dental es la acumulación de bacterias entre el diente y la encía, aunque en su desarrollo también influyen factores genéticos, el tabaco y el estrés.
Uno de los riesgos de la periodontitis es que en sus fases iniciales puede no mostrar síntomas. La mejor forma de prevenir es acudir a revisiones periódicas, ya que muchas personas la padecen sin ser conscientes de ello.
¿QUÉ ES EL CURETAJE DENTAL?
El curetaje dental es el tratamiento aplicado para eliminar la placa de dientes y encías que no se alcanza con el cepillado y los cuidados diarios.
El periodoncista utiliza un equipo de ultrasonidos y curetas para eliminar la acumulación de bacterias. La cureta es un instrumental odontológico con finos bordes y puntas redondeadas que permiten alcanzar los tejidos blandos durante la limpieza sin causar lesiones.
¿QUÉ ES EL RASPADO DENTAL Y EL ALISADO RADICULAR?
El raspado dental y alisado radicular son las técnicas que permiten mantener sanas las encías. Su objetivo es eliminar toda la placa bacteriana y los cálculos acumulados.
Mediante el raspado dental se accede al interior de las bolsas periodontales y se deja la superficie de la raíz dental totalmente descontaminada, lo que se conoce como alisado radicular.
Este procedimiento se puede realizar en una o varias sesiones, según lo indique el periodoncista. Generalmente, se aplica anestesia local, de modo que es un tratamiento indoloro.
Una vez terminado el tratamiento, es imprescindible llevar a cabo controles periódicos porque la piorrea dental es una enfermedad crónica. Si se sigue correctamente el tratamiento y se cumplen las visitas de mantenimiento periodontal, no es necesario repetir el raspado y alisado radicular.
Este tratamiento es muy efectivo que evita la pérdida de piezas dentales y elimina el factor de riesgo de aparición de otras patologías asociadas.
Recuerda: el cuidado de las encías te ayuda a mejorar tu salud bucodental y tu calidad de vida.